Malaquita

Sumérgete en el encanto cautivador de la Malaquita, la "piedra de la naturaleza", reconocida por sus vibrantes remolinos y bandas verdes que cautivan la vista. Este exquisito cristal es una combinación perfecta de propiedades energizantes y calmantes, que inspiran coraje y optimismo. Es tu aliada para afrontar los cambios de la vida con el corazón abierto, ayudándote a encontrar la armonía interior y mantener una actitud positiva.

Característica destacada

Lo que distingue a la malaquita es su capacidad única para limpiar y activar los chakras, especialmente los chakras del corazón y de la garganta. Esta característica la convierte en una opción ideal para quienes buscan crecimiento personal y transformación.

Otro beneficio atractivo

La malaquita no solo se trata de la paz interior; también ofrece protección. Su poderosa energía te protege de las influencias negativas, lo que la convierte en un elemento imprescindible para quienes valoran el bienestar emocional y espiritual.

Punto de venta único adicional

Más allá de sus beneficios espirituales y emocionales, la malaquita también es una pieza decorativa impresionante. Sus patrones hipnotizantes y tonos intensos la convierten en una hermosa adición a cualquier espacio, ya sea tu hogar, oficina o rincón de meditación.

Qué hace especial a este artículo

• Cualidades físicas: Las bandas naturales del cristal y su lujosa paleta de colores hacen que cada pieza sea única, asegurando que tu Malaquita sea tan especial como tú.
• Cualidades esotéricas: Conocida por atraer la buena fortuna y la prosperidad, la malaquita fomenta un entorno de abundancia y éxito.

Aseguramiento de la calidad

Cada pieza de malaquita está elaborada con una artesanía superior por Sylvia Crystals. Nos aseguramos de que reciba un producto de alta calidad que cumpla con nuestros estrictos estándares de excelencia.

Instrucciones de cuidado

Para mantener la belleza y potencia de su Malaquita, límpiela suavemente con un paño suave. Evite la exposición a productos químicos agresivos, la luz solar prolongada y el agua. Para recargar su energía, colóquela bajo la luz de la luna o cerca de un grupo de Selenita.